Las escaleras son el cordón umbilical que unen plantas y desniveles. Pero aquellos que piensen que sirven solo para subir o bajar están equivocados. Si únicamente fuera por esto bastaría, en muchos casos, con un aséptico ascensor. Al igual que Louis Kahn preguntaba a los muros y a los pilares que querían ser, nosotros podemos también interrogar a las escaleras sobre cual es su vocación. Porque las escaleras, con su indumentaria y atrezo, nos hablan de mucho más.